sábado, agosto 12

EL MUNDO 10000 - 2000 A.C.

Después de la última era Glacial la tierra se hizo más cálida, los desiertos y los glaciales se fueron reduciendo, las aguas fueron desembocando en los mares para evaporarse y condensarse en las nubes y caer en forma de lluvia formando numerosos bosques de los cuales se alimentaban animales herbívoros y carnívoros. Sin duda el más beneficiado fue el hombre que pudo ir ocupando casi todo el mundo.

Hace 10.000 años el hombre era nómade y se dedicaba a la pesca, caza y recolección de frutos silvestres, se trasladaba de un lugar a otro cuando el alimento escaseaba, lo cual sucedía especialmente en época de cambio de estación.

Antes de la era glacial en la zona de Levante, ubicada en la franja costera oriental del mediterraneo, se habían empezado a explotar hierbas silvestres con semillas de las cuales se obtenían la cebada y el trigo. El 10.000 antes de cristo estas semillas comienzan a extraerse de su habitad natural intencionalmente para ser cultivadas en otras zonas; ejemplo que se será imitado en muchas localidades del planeta.

La importancia de la Agricultura en las primeras civilizaciones:

La consecuencia inmediata de la agricultura radica en el desarrollo de asentamientos humanos de mayores tamaños y más permanentes, el hombre comienza a ser sedentario.

La actividad agrícola se intensifica con la creación del arado en Europa y Asia y el norte de África, lo cual permite cultivar zonas más extensas de tierras. En las zonas más áridas cercanas a sistemas fluviales se construyen canales de riegos para conducir el agua hacia a los campos de cultivos. Lo mismo ocurrió en las laderas empinadas de las montañas con la construcción de bancales.

Los nuevos asentamientos humanos exigían una nueva organización social y nuevas ideologías políticas y religiosas que estaban representadas por el arte. Reyes y Dioses requerían estatuas y templos para proclamar su poder y poner énfasis en su posición. Se crea la escritura para el control de las finanzas y la elaboración de textos literarios y rituales.

Las primeras ciudades de la antigüedad surgen en cuatro zonas con la particularidad de estar situadas cerca de sistemas fluviales importantes: Mesopotamia con el Tigris y el Eufrates; Egipto con el Nilo; China con el Río Amarillo; e India con el Ganges y el Indo.